A PROPOSITO DE “QUITATE LA MASCARA” REFLEXIONES SOBRE DON BENITO JUAREZ

Profr. Jesús Fco. Santana E.

"No deshonra a un hombre equivocarse. Lo que lo deshonra es la perseverancia en el error."


Con cierto interés he leído el artículo del Lic. Luis Villegas Montes sobre Don Benito Juárez titulado "Quítate la máscara", publicado en tres partes en un diario local, y sobre él, quiero hacer algunas precisiones:
Se desprende de su contenido, que al Lic. Villegas Montes le ganó más su filiación conservadora y  Neo-Panista que su posición como magistrado de la VII sala penal en el S.T.J.E.
En fin,eso pasaría a segundo término, si no fuera porque aplicando su criterio como magistrado a los tiempos actuales, y tuviera que juzgar a Don Benito Juárez,como fiel admirador de la Santa Inquisición, seguramente lo condenaría a morir quemado como en la edad media lo hicieron con Jacques de Molay.
Se desprende de su argumentación que intenta ser de análisis histórico, y conociendo las fuentes en las que se documentó para escribir el artículo, se entiende que sus palabras no son sino el eco  de historiadores antijuaristas, con poca aportación personal.
La figura de Juárez permanece y permanecerá por siempre en un lugar sagrado para la mayoría de los mexicanos.
Es común que historiadores contemporáneos cuando juzgan la obra de los héroes nacionales, lo hagan desde el momento presente y no se ubiquen en el tiempo y en las circunstancias en que a esos personajes les tocó vivir, de ahí que sus conclusiones resulten erróneas y poco objetivas.
Afortunadamente en el caso de Juárez ,y creo que único, existen infinidad de pruebas de su actuar político, gracias a su basta producción epistolar, amén de innumerables testimonios y documentos que han quedado para ser analizados por verdaderos historiadores, que no han dejado duda sobre su honradez como funcionario, y particularmente como presidente de México.
Juárez ya ha sido juzgado por la historia y como cualquier ser humano tuvo aciertos y cometió también errores, pero en el fiel de la balanza de la cual el Lic. Villegas debe conocer bastante, fueron muchos más los primeros que los segundos.
Calzarnos las botas del benemérito no es sencillo, ubiquémonos en esa época y caminemos por esa patria sufrida, apenas en formación, con pocos años de haber nacido a la vida independiente, y donde la disputa por el poder al interior era atroz ,debido a las diversas facciones que se lo disputaban, por el clero político y también por intereses y ambiciones de Estados Unidos y de otros países europeos.
La permanencia de 14 años de Don Benito Juárez como presidente de México era más que justificada, ya que era la única manera de mantener la soberanía nacional y se requería una mano firme y enérgica que probablemente, y gracias a sus orígenes de raza indígena,le permitieron a Juárez gobernar aún en contra de resentidos que veían en su comportamiento rasgos de terquedad.
Sobre la subvención a la prensa y el fraude electoral no hay mucho que decir, afortunadamente existe amplia información para explicar la necesidad de sus reelecciones y comprender el peregrinar por el vasto suelo nacional en defensa de la república y entender su relación con el gobierno norteamericano.
Hablando de la partida secreta con la que se pretende pintar a Juárez como corrupto y deshonesto, basta con leer la humildad y las carencias con que vivió el benemérito para que esa acusación caiga por sí sola.
Habiendo muerto intestado y tras la muerte de su esposa Doña Margarita Maza de Juárez, es interesante ver los bienes materiales que dejó a sus herederos según el juicio de intestado fechado el 19 de mayo de 1873 ante el notario público José Villela, que confirma la inmaculada honestidad y probidad de Don Benito Juárez.
Por lo demás,voces plañideras como las de aquellos antijuaristas que todavía existen seguirán escuchándose pero solo le harán a Juárez , lo que el viento.NADA.

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